7 de julio de 2023

SI ALGUIEN NO CREE EN TI...

Por Bertha Vasconcelos

Una persona que conoces ha dejado de llamarte, no contesta a tus llamadas ni correos, te ignora, te aleja o te denigra. Podría ser que esa persona está “totalizando” por lo que te está viendo como el problema. Tal vez cometiste un error o no cumpliste con sus expectativas pero eso no tiene que hacerte sentir avergonzado o te hace una “mala” persona, como aquella irracionalmente pudiese creer. Si alguien no cree en ti... tu si cree en ti. Que esto no mine la confianza en ti mismo y continua tu camino, convencido de que has hecho lo mejor que has podido.

Los seres humanos cometemos el grave error de totalizar y juzgamos a la persona de manera completa, en lugar de separar la conducta específica del ser completo que ésta es. Lo mismo hacemos con los hijos y los padres. Los niños ni los padres son el problema, sino alguna de sus conductas, pero ni toda su conducta ni todo él/ella es el problema. Los conflictos de pareja encontrarían resolución más fácilmente si no totalizáramos. La realidad es que no nos gustó algo que hizo nuestra pareja, y terminamos totalizando y juzgando a la persona completa que va alimentando el resentimiento que más tarde provoca discusiones y pleitos.

Los psicólogos cognitivo conductuales señalan que el acto de totalizar o absolutizar es una forma de pensamiento irracional. Se manifiesta en frases que empiezan con las palabras debes, deberías, deberían, siempre y nunca. La absolutización se refiere a la creencia de que "las cosas y personas deben ser a mi manera y como yo quiero que sean, incluyéndome."

Totalizar proviene de las generalizaciones irracionales que una persona se ha formado a partir de un estímulo al cual le ha añadido su propio significado, así como de creencias generacionales. Las personas interpretamos los eventos y las acciones de los demás en función de nuestro muy personal sistema de creencias y la forma en que pensamos. Esto quiere decir, que lo que pensamos refleja nuestra forma de ver la realidad, pero eso no significa necesariamente que ésa sea la realidad. Aprendimos a pensar irracionalmente, pero podemos aprender a pensar de forma más racional.

Una cosa es describir, y otra el juzgar. El que juzga a los demás lo hace a sí mismo. Mientras más severamente juzga una persona a los demás, más severa es con ella misma. Cuídate de no cometer el mismo error que esas personas que no creen en ti. 

Deseamos que las guerras y la violencia, a nivel nacional y mundial terminen, pero simplemente no podemos dejar de juzgar y crucificar a las personas que nos rodean. Yo quisiera terminar este artículo con una pregunta: Si no comenzamos en casa, la escuela, el trabajo y los amigos, ¿dónde comenzaremos?

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