24 de octubre de 2010

Cómo Liberarse del Autosabotaje

Por Bertha García Vasconcelos
www.psicologiaycoaching.com


Estábamos en bancarrota y sin trabajo. Nos faltaba mucho para lanzar nuestro negocio. Hubo veces en que incluso no teníamos ni un techo, dormíamos en un Toyota Celica golpeado. Honestamente puedo decir que 1985 fue el peor año de mi vida… Nuestras tarjetas de crédito estaban hasta el tope… Viendo en retrospectiva, nuestro motor fue esa horrible situación. Nos condujo a encontrar una forma de salir del desastre en que estábamos… Finalmente llegamos al punto en que simplemente habíamos tenido demasiado de ese caos. Roberto llegó a la conclusión de que nadie mejoraría su vida excepto él y de que era tiempo de tomar medidas drásticas. Yo dejé de sentir pena por mí misma. Dejé de culpar a los demás por mis circunstancias. Y los dos simplemente decidimos controlar nuestro futuro y ponernos a trabajar. Y eso hicimos.” Del libro Mujer Millonaria de Kim Kiyosaki (esposa de Robert Kiyosaki autor de Padre Rico Padre Pobre).

Cuando los patrones de autosabotaje han tomado el control de nuestras vidas, culpamos a los demás. Nos sentimos frustrados y enojados con la vida. Podríamos sentir lástima por nosotros mismos y hasta podríamos preguntarnos “¿Por qué yo?” Nos sentimos víctimas de las circunstancias de la vida.

El texto de Kim Kiyosaki nos da un claro ejemplo de cómo se vive el autosabotaje inconsciente que semeja la caída en una espiral descendente, como un poderoso torbellino que nos lleva a un obscuro pozo del cual pareciera imposible de salir. Es hasta que la persona toca fondo y se dice a sí misma “ya basta,” que decide hacer algo para cambiar su vida. Coincido con Kim en que, en muchas ocasiones, ese tipo de situaciones extremas son las que nos obligan a utilizar nuestra creatividad para “salir del hoyo” y nos motivan a producir cambios trascendentales en nuestra vida que generan una gran realización personal. Es como si necesitáramos vivir el caos doloroso para impulsarnos hacia arriba y dejar nuestra zona de confort.

Durante mucho tiempo se te han presentado obstáculo tras obstáculo. Sientes que lo has intentado todo. No sabes que más hacer. Sin embargo, el único cambio requerido es en tu interior. ¿Pregúntate que necesitas aprender de esa situación? O ¿qué necesitas hacer para mejorarla? De pronto viene a tu mente claramente el aprendizaje que te ofrece ese pasaje triste en tu vida. O, tal vez te das cuenta que necesitas ayuda y eso está bien. A veces, no es difícil aceptarlo porque la arrogancia del ego nos impide el buscar ayuda.

Volver a empezar es posible. Es salir de un momento de obscuridad en nuestra vida. Para ello, es indispensable percatarse de lo que te detiene. De aquello que está impidiendo que alcances tus metas. Está en tu interior y no podías verlo con claridad porque es parte de tu sombra. Cuando puedas ver lo que permanece oculto en ti, has crecido. La conciencia al fin ilumina esos puntos obscuros de tu propia sombra. Cambia la interpretación que das a lo que te sucedió. Tómalo solamente como una experiencia más de vida que te permitió crecer. No es nada por lo que tengas que sentir vergüenza, reprocharte o juzgarte. Has aprendido del obscuro torbellino. Perdónate por lo que consideras errores. Perdona a los que consideras te hicieron daño. No veas ese bache en tu vida como un fracaso sino como una oportunidad para conocerte mejor y crecer aun más. Atesora las lecciones aprendidas que enriquecen tu vida. Deja ir el pasado agradecido porque hoy es una nueva oportunidad para crear la vida que deseas.

Recuerda que gracias a todas las vivencias en tu vida hoy eres una nueva persona, mejor y más fortalecida.

Imagen: Laberinto de Leonora Carrington

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